domingo, 12 de mayo de 2013

Coqueteando con la traducción erótica (Experimento Moonlight)


Cuando, hace unas semanas, escuché hablar del Experimento Moonlight, organizado por mis compatriotas isleños de ETEP, no lo dudé mucho antes de enviar mi solicitud de participación. Como les expliqué a ellos en mi motivación, siempre me ha gustado la traducción literaria, pero he trabajado muy poquito con ella: solo algunos textos sueltos durante la carrera, ni siquiera una asignatura cuatrimestral. Una pena, pero en el plan de estudios de mi facultad era solo una asignatura optativa que no tuve tiempo de cursar.

Además, para qué negarlo, el morbo de la traducción erótica también me llamaba la atención. Al fin y al cabo, se trataba de algo completamente nuevo y, a priori, entretenido. En definitiva, un reto muy interesante.

Pronto me topé con los primeros problemas de traducción, que se vinieron repitiendo a lo largo de todo el relato. Voy a hablar en general, para no destripar aquí asuntos muy concretos del relato, porque creo que somos varios los que hemos participado o vamos a participar en este experimento, y además porque corresponde a los compañeros de ETEP realizar el estudio posterior. Por ello me gustaría comentar, a grandes rasgos, las complicaciones que me han ido saliendo.

Sin duda, lo más difícil para mí ha sido combinar un lenguaje casi soez con una narración marcadamente lírica. El hilo conductor del relato es la relación de las mujeres y el sexo con la luna y la luz que esta emite. En sí, este es un pensamiento muy poético, pero el narrador va entrelazándolo continuamente con el puro y simple acto sexual, utilizando, en el texto original inglés, un vocabulario de lo más llano y, en ocasiones, incluso vulgar y malsonante («dick»«cock»«pussy»«cunt»«fuck», etc.). Esto me ha generado, principalmente, dos problemas:

1. Adecuación del registro. Me cuesta hablar de la belleza de la naturaleza y la luz de la luna mientras nombro pollas y coños. ¿Será que soy rara yo? No sé, en ocasiones me costaba mucho mantener un estilo uniforme y que ciertas palabras cuadraran en ciertas frases. ¿Será que en inglés estas palabras tienen un rango de uso más amplio que en español? ¿O solo que mi sensibilidad en español es, lógicamente, mucho mayor que en inglés, y por ello me chocan tanto cuando considero que están en contextos inadecuados?

2. Sinonimia. Ya sabemos que términos para designar los órganos sexuales de ambos sexos no faltan ni en inglés ni en español, pero, al igual que en la lengua en general, los sinónimos puros no existen. Cada una de estas palabras viene acompañada, en este campo quizás más que en otros, de una larga serie de connotaciones y matices de registro. Algunas pueden sonar demasiado cursis, otras demasiado soeces, otras insultantes... Es todo un mundo en el que nunca antes me había parado a pensar tanto, un interesantísimo mundo de matices que viene tanto a complicar la tarea del traductor, como a conferirle variedad y riqueza.

Por último, ya pasando a otro aspecto menos explícitamente sexual, aunque no menos sensual, la traducción del relato me hizo recordar las palabras de alguno de mis profesores de inglés o de C/A, que nos llamaban la atención sobre el hecho de que los anglosajones utilizan determinantes posesivos mucho más a menudo que nosotros, en particular cuando se trata de «sus» partes del cuerpo y el uso es superfluo o redundante. He intentado tener bastante cuidado con eso durante el proceso de traducción. Aunque no es incorrecto traducir «(she) dugs her nails into my thigh» por «clavó sus uñas en mi muslo», suena más natural decir «me clavó las uñas en el muslo».

Y hasta aquí mi pequeño análisis de un encargo de traducción diferente y agradable, que resultó ser una tarea más ardua de lo que en un primer momento había creído. Espero con ganas los resultados del experimento. Quiero saber si estas dificultades las he encontrado solo yo y si proceden de la falta de experiencia en este campo, como creo.


2 comentarios:

  1. Si te interesa la traducción erótica, te recomiendo encarecidamente que leas las siguientes entradas del blog de Scheherezade Surià:

    Traducir erótica (I) – Tópicos y vocabulario (http://enlalunadebabel.com/2013/05/21/traducir-erotica-i-topicos-y-vocabulario/)

    Traducir erótica (II) – Proceso y dificultades (http://enlalunadebabel.com/2013/05/28/traducir-erotica-ii-proceso-y-dificultades/)

    Esta traductora también ha escrito sobre cómo traducir el lenguaje soez, algo que mencionas en tu entrada:

    El traductor insolente: traducir el lenguaje soez (http://enlalunadebabel.com/2012/12/10/el-traductor-insolente-traducir-el-lenguaje-soez/)

    ResponderEliminar
    Respuestas
    1. Muchas gracias por los apuntes, aunque ya he leído todos esas fantásticas entradas de Scheherezade, y siempre me dejan con la boca abierta de lo mucho que aprendo con ellas.

      Eliminar